Etapa 14: de São João da Madeira a Porto
Jueves 21 de Marzo del 2019
Hola de nuevo,
Pues como les dije ayer, me vine a Oporto. La verdad, si bien estuvo largo -34 kms-, me lo esperaba más difícil. Creo que llegué mucho más molido a Santarem y/o Coímbra. Quizá la perspectiva de tener un día de "descanso" mañana fue un aliciente psicológico. El caso es que llegué sin problemas. Además el día estuvo perfecto para caminar: ni una sola nube y una temperatura de unos 20 grados. Ideal.
Salí muy temprano de São João da Madeira: 6:30 de la mañana. Creo que era el único loco en la calle. Preferí caminar muy temprano y evitar al máximo el sol de la tarde. Ya había mencionado que estaba en la zona suburbana de Oporto, por lo que prácticamente todo el día fue sobre asfalto. Sin embargo, no estuvo tan mal.
Me parece que hubieron muchos aspectos a destacar. Primero el paso por Arrifana, con más casas
brasileiras y su iglesia de azulejos; después el camino sobre la Vía Romana XVI (ya al menos vi el nombre de la vía en una placa), con un empedrado que se ve viejo y no cuentos; y después la llegada a Oporto, que merece trato aparte.
Paré dos veces durante la mañana para café y bocadillo de queso. Pero lo espectacular fue en Rechousa, unos 5 kms antes de la ciudad, en zona suburbana. Noté un restaurant que estaba hasta la madre: hagan de cuenta la barbacoa de Santiago. Gente esperando mesa. Algo me dijo que no me lo podía perder. No saben qué acierto. Me aventé una "sopa da pedra" (leguminosas con carne) para después refinarme un "pernil assado no forno" (chamorro al horno), acompañado de arroz, patatas y vino. Café para terminar. La neta, disfruté la comida harto. Tenía que reponer las calorías.
Como les dije, la llegada a Oporto es espectacular. La bajada por la avenida de la República ya presagiaba lo bonito de la ciudad, pero cruzar el Río Duero desde una altura de unos 50 metros con la vista del casco histórico es impresionante. Qué ciudad más bonita. Definitivamente fue un acierto haber adelantado la etapa y poder "descansar". Vuelvo a entrecomillar porque me late que mañana no pararé de visitar lugares. Hay tanto que ver.
Por cierto, llevo 378 kms. Hoy pasé el punto medio del reto. Para adelante tengo unos 360. Voy bien, contento y bien alimentado. Van más fotos de otro gran día.
Abrazo
PS: Ricardo me dice que los árboles de corcho se llaman alcornoques. Es que en mi pueblo no se dan más que los mezquites y los pirules... Los viajes ilustran.
Hola de nuevo,
Pues como les dije ayer, me vine a Oporto. La verdad, si bien estuvo largo -34 kms-, me lo esperaba más difícil. Creo que llegué mucho más molido a Santarem y/o Coímbra. Quizá la perspectiva de tener un día de "descanso" mañana fue un aliciente psicológico. El caso es que llegué sin problemas. Además el día estuvo perfecto para caminar: ni una sola nube y una temperatura de unos 20 grados. Ideal.
Salí muy temprano de São João da Madeira: 6:30 de la mañana. Creo que era el único loco en la calle. Preferí caminar muy temprano y evitar al máximo el sol de la tarde. Ya había mencionado que estaba en la zona suburbana de Oporto, por lo que prácticamente todo el día fue sobre asfalto. Sin embargo, no estuvo tan mal.
Me parece que hubieron muchos aspectos a destacar. Primero el paso por Arrifana, con más casas
brasileiras y su iglesia de azulejos; después el camino sobre la Vía Romana XVI (ya al menos vi el nombre de la vía en una placa), con un empedrado que se ve viejo y no cuentos; y después la llegada a Oporto, que merece trato aparte.
Paré dos veces durante la mañana para café y bocadillo de queso. Pero lo espectacular fue en Rechousa, unos 5 kms antes de la ciudad, en zona suburbana. Noté un restaurant que estaba hasta la madre: hagan de cuenta la barbacoa de Santiago. Gente esperando mesa. Algo me dijo que no me lo podía perder. No saben qué acierto. Me aventé una "sopa da pedra" (leguminosas con carne) para después refinarme un "pernil assado no forno" (chamorro al horno), acompañado de arroz, patatas y vino. Café para terminar. La neta, disfruté la comida harto. Tenía que reponer las calorías.
Como les dije, la llegada a Oporto es espectacular. La bajada por la avenida de la República ya presagiaba lo bonito de la ciudad, pero cruzar el Río Duero desde una altura de unos 50 metros con la vista del casco histórico es impresionante. Qué ciudad más bonita. Definitivamente fue un acierto haber adelantado la etapa y poder "descansar". Vuelvo a entrecomillar porque me late que mañana no pararé de visitar lugares. Hay tanto que ver.
Por cierto, llevo 378 kms. Hoy pasé el punto medio del reto. Para adelante tengo unos 360. Voy bien, contento y bien alimentado. Van más fotos de otro gran día.
Abrazo
PS: Ricardo me dice que los árboles de corcho se llaman alcornoques. Es que en mi pueblo no se dan más que los mezquites y los pirules... Los viajes ilustran.
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